🌹 Dios es mi hogar… y desde ahí florece el Amor Verdadero.

Durante mucho tiempo sentí que algo me faltaba.
Una presencia, una energía, un compañero de vida.
Sentía un vacío tan profundo que creí que solo podía llenarse con alguien más.
Con una pareja. Con amor romántico. Con esa “otra mitad” que tantas veces nos enseñan a buscar afuera.

Pero hoy lo comprendo con el corazón abierto:
ese vacío no era una carencia.
Era el llamado de Dios en lo más profundo de mi ser.

🌷 Ese anhelo que sentía no era por alguien externo.
Era el eco de mi alma recordándome el hogar.
Recordándome que siempre estuve acompañada.
Que Dios nunca me soltó.
 Que incluso en mis momentos más oscuros, Su Presencia me sostenía, silenciosa, amorosa, paciente.

Cuando comencé a entregarme plenamente a Él,
cuando dejé de buscar afuera lo que solo el Amor Divino podía darme…
algo cambió en mí.

💫 Descubrí que nunca estuve sola.
Y que el amor que siempre busqué… ya habitaba en mí.

Desde esa verdad, profunda y viva,
desde ese Amor que no exige, que no condiciona, que solo sostiene y revela,
nació también algo sagrado:
 la conexión real con mi Llama Gemela.

Porque la Unión con mi Llama Gemela no viene de la necesidad,
ni de la falta, ni del apego.
Sino de la plenitud.
De ese espacio dentro de mí donde Dios vive.
Donde todo amor verdadero se revela.

🕊️ Hoy descanso en ese amor.
Hoy me sostengo en Él.
Y desde ahí…
todo florece.🌷

“Dios es mi hogar.

Dios es mi base.
 Y desde ahí, todo amor verdadero se revela.”

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¿Sientes tú también ese llamado en tu corazón?
Te acompaño a volver al Amor que eres.
A recordar que Dios es tu raíz, tu guía y tu fuente de Unión Verdadera.

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