
🌹 El pasado no existe… y Dios me invita a florecer.
Durante mucho tiempo creí que debía sanar mi pasado para poder avanzar.
Volvía una y otra vez a esas memorias, intentando entender, perdonar, reparar, reconstruirme desde lo que ya no estaba.
Y aunque honrar lo vivido es necesario… hoy comprendo algo más profundo:
El pasado ya no existe.
Y seguir sosteniéndolo es como intentar respirar bajo el agua.
Te ahogas. Te agotas. Te desconectas de lo que eres hoy.
El pasado no vive aquí.
Y tú tampoco.
El amor verdadero —el que viene de Dios— solo puede encontrarse en el presente.
Aquí, donde respira.
Aquí, donde decide rendirte a Su abrazo invisible.
Aquí, donde ya no necesitas cargar lo que fuiste, sino recordar lo que Eres:
una chispa divina, sostenida por la fuente eterna del Amor.
🌹Florecer no es volver al pasado.
Es permitir que el Amor te toque ahora.
Es abrirte como una flor a la luz de lo que ya está dentro de ti.
Es descansar en la presencia de Dios en tu corazón y descubre que ahí también habita tu Llama Gemela.
El vínculo sagrado no nace del dolor compartido,
sino del Amor que ambas almas reconocen como su origen.
Hoy, Dios me susurra:
"Basta de habitar en el ayer.
Aquí estoy.
Hoy.
En ti.
A través de ti.
Florece en Mí."
✨ No hay nada que sanar en el pasado que no se sane ahora,
al permitir que el Amor te envuelva, te sano y te haga nueva.
Confianza. Suelta. Florece.🌷
¿Te gustaría recibir más mensajes como este o acompañamiento en tu camino espiritual?
✨ Te invitamos a explorar mis talleres, meditaciones y sesiones individuales donde caminamos juntas hacia la verdad de tu alma: que tú ya eres Amor.
Puedes ver mi nuevo vídeo aquí →