
El Amor de Dios no se pierde: Sanando la Confusión del Rechazo🌹🌹
A veces proyectamos en Dios las mismas dinámicas que vivimos en nuestras relaciones humanas. Como en la tierra muchas de nuestras relaciones son condicionadas —dependen de lo que hagamos, de si “cumplimos” o no— tendemos a creer que con Dios pasa lo mismo.
Pensamos que si lo hemos negado, si lo hemos abandonado, si nos equivocamos, Él nos castigará o nos pondrá pruebas difíciles para demostrarnos que no somos dignos de su amor. Sentimos miedo a que nos abandone o nos rechace, tal como hemos experimentado con personas en nuestro entorno, incluso con nuestra Llama Gemela.
Pero la verdad es otra: Dios nunca abandona, nunca rechaza, nunca castiga. Dios solo ama.💖
Él desea para nosotros todo lo mejor, lo más abundante, lo más pleno. Es nuestro propio corazón el que a veces pone barreras para recibir ese amor.
Estas barreras suelen presentarse como resistencia y control:
- Resistimos soltar viejas creencias porque tememos perder quiénes somos.
- Controlamos el resultado externo para sentirnos valiosos o exitosos, en lugar de descansar en el valor infinito que Dios ya nos dio.
- Nos aferramos a lo que creemos que nos sostiene, cuando en realidad nos aprisiona.
Desde esa resistencia, llegamos incluso a culpar a Dios de nuestras dificultades, como si Él nos pusiera pruebas o quisiera castigarnos. Pero no es así. El dolor que sentimos proviene únicamente de no permitir que su amor fluya en nosotros.
Cuando experimentamos rechazo o abandono con nuestra Llama Gemela, en el fondo estamos sintiendo ese mismo miedo a que Dios nos deje de amar. Sin embargo, Él jamás lo hará. Lo único que ocurre es que, inconscientemente, nosotros lo estamos rechazando al no aceptar plenamente que nos ame de forma incondicional.
La sanación comienza cuando elegimos abrirnos a su amor. Entregarnos a Dios no significa perder, sino todo lo contrario: es recibir y honrrar lo que siempre nos ha pertenecido. Tener fe y confianza en que su guía es perfecta es el paso más amoroso y seguro que podemos dar.
💖 Cuando reconoces que jamás has sido rechazado por Dios, comprendes que tampoco puedes ser rechazado por tu Llama Gemela. Todo miedo se disuelve en la certeza de que el amor verdadero es eterno, incondicional y seguro.
Y desde ahí, das un paso hacia tu Unión Armoniosa, hacia la paz, hacia tu propósito y hacia la vida abundante que tu corazón desea.
Con cariño, Encarni.🌷